eJournals Vox Romanica 68/1

Vox Romanica
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Francke Verlag Tübingen
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2009
681 Kristol De Stefani

Manuel Ariza, Estudios sobre el extremeño, Cáceres (Universidad de Cáceres) 2008, 132 p.

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2009
Stefan  Ruhstaller
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lohnte daher keine besondere Erwähnung. Im in Rede stehenden Werk sind die formalen Versehen jedoch recht zahlreich und auch keinesfalls auf die Ebene der «Tippfehler» beschränkt 2 : N51 (32) zitiert Moreu-Rey nach der zweiten Auflage von 1999 - in der Bibliographie ist indes nur die Erstausgabe von 1982 verzeichnet. N184 (63) benennt die nicht zuletzt dank ihrer Medienpräsenz sehr bekannte mallorquinische Literaturprofessorin und Schriftstellerin Maria de la Pau Janer als «Maria Janer de la Pau». Es erschließt sich auch nur schwer, was die Autorin meint, wenn sie feststellt: «die dominante Sprache setzt sich auf Kosten der dominierenden Sprache durch» (100). Unglücklich ist es ganz sicher ebenfalls, wenn ein in der katalanischen Soziolinguistik zentraler und damit für die Arbeit zweifellos wesentlicher Autor wie Lluís V. Aracil fortwährend nach Sekundärquellen zitiert wird (in N325, N326 und N337 nach Vallverdú; in N339 nach Boix i Fuster/ Vila i Moreno). Mit (mehr oder/ und sorgfältigerem) Korrekturlesen wäre möglicherweise auch zu vermeiden gewesen, dass die letzten beiden Textzeilen auf Seite 107 mit den ersten beiden auf Seite 108 identisch sind. Und schließlich genügt ein einziger Blick um festzustellen, dass sich in der Bibliographie (391) «Quintana» nach «Wesch» nicht in der alphabetisch korrekten Reihenfolge befindet . . . Derartige formale Fehler, die den ansonsten überaus positiven Gesamteindruck erheblich stören, sind umso ärgerlicher, da es der Autorin gelungen ist, ansprechende Ergebnisse vorzulegen und mit ihrer Arbeit einen wesentlichen Beitrag zur Beschreibung der aktuellen Sprachsituation und -politik in den katalanischsprachigen Gebieten zu leisten. Uwe Dietzel ★ Manuel Ariza, Estudios sobre el extremeño, Cáceres (Universidad de Cáceres) 2008, 132 p. El libro reúne una colección de estudios dedicados por parte de uno de los más destacados investigadores en historia de la lengua española y dialectología a la variedad lingüística extremeña. Manuel Ariza fue profesor en la Universidad de Extremadura en Cáceres desde 1975 hasta 1989, período durante el cual, como pone de relieve A. Salvador en el prólogo, contribuyó de forma decisiva a la actividad investigadora en materia lingüística: si hasta 1975 la bibliografía sobre el extremeño se limitaba a poco más que algunos estudios debidos a investigadores alemanes de principios de siglo, «el modélico de Espinosa sobre los arcaísmos dialectales o el llevado a cabo por Alonso Zamora Vicente en la zona de Mérida», predominando, no obstante, los «análisis efectuados por eruditos locales, de muy desigual valor» (14), durante su presencia en Cáceres Ariza publica importantes estudios lingüísticos, impulsa numerosos proyectos de investigación, recopila abundante material lingüístico en encuestas dialectales y en archivos, organiza seminarios y encuentros, y funda, conjuntamente con A. Salvador, la Asociación Internacional de Historia de la Lengua Española, organización que, desde la celebración de su primer congreso en Cáceres en 1987, ha dado un fuerte impulso a la investigación histórica sobre el español. El libro pone a nuestra disposición once trabajos de investigación publicados inicialmente en medios de difusión variable: cuatro de ellos aparecieron en el cacereño Anuario de Estudios Filológicos; dos en actas de los Congresos Internacionales de Lingüística y Fi- 377 Besprechungen - Comptes rendus 2 Da es keinesfalls die Absicht des Rezensenten ist, jedem fehlenden Buchstaben und/ oder falsch gesetzten Spatium «hinterher zu jagen» (was hier den Rahmen einer Rezension allerdings auch deutlich sprengen würde), verweist er nur auf einige schwerwiegendere Fälle, die nachfolgend einfach aneinander gereiht werden. lología Románicas; uno se publicó en un homenaje, otros en las actas de un seminario de lexicografía celebrado en la Universidad de Jaén, en las revistas sevillanas Cauce y Philologia Hispalensis, así como a través de Internet, respectivamente. Abre la colección de estudios el titulado «El extremeño», visión de conjunto que comienza con una reflexión acerca de conceptos polémicos, precisamente en relación con la clasificación del extremeño, como son dialecto y habla de tránsito. Ariza se posiciona claramente en contra de la consideración - que ha tenido seguidores de peso hasta fecha reciente debido a ser la opinión de Menéndez Pidal - del extremeño como «subdialecto del leonés», puesto que la conservación como aspirada de la Flatina, el principal argumento para tal adscripción, constituye un rasgo tan propio o más del castellano que del leonés al hallarse difundida por amplias áreas del oeste y del sur de la Península: se trata, como afirma Ariza, de «viejos restos del castellano medieval, barridos en la Meseta norte por la pronunciación ‹burgalesa› sin aspiración. Téngase en cuenta que la aspiración es un continuum de toda la España centro-meridional». En relación con el grado de pervivencia de las modalidades dialectales (muy desigual en diferentes localidades) el autor subraya el papel de la conciencia lingüística y del prestigio concedido por los hablantes al estándar castellano. Tras esbozar la historia de la repoblación medieval, que ofrece la clave para comprender en buena medida la distribución diatópico de los fenómenos dialectales, enumera pormenorizadamente los rasgos característicos del vocalismo y del consonantismo (muchos limitados a áreas muy concretas) y los explica desde el punto de vista histórico-lingüístico y dialectológico. Al comentar las características morfosintácticas subraya la necesidad de discernir entre rasgos propiamente extremeños y otros generalmente empleados en el español coloquial o vulgar; diferencia de nuevo entre rasgos dialectales explicables como arcaísmos castellanos (como el empleo del posesivo precedido del artículo) y otros que constituyen un vínculo con el leonés (como el sufijo diminutivo -ino/ -ín). Más extensa es la exposición de los fenómenos léxicos, que se clasifican, partiendo de argumentos de tipo geográfico, dialectal y etimológico, en arcaísmos (acender ‘encender’, acordar/ recordar ‘despertar’, güebra ‘jornada de trabajo’), occidentalismos (fechar/ afechar/ pechar ‘cerrar’, bago ‘grano de uva’), portuguesismos (alpendada ‘desván’, canga ‘yunta de dos caballerías’), leonesismos (frijón ‘judía’, lamber ‘lamer’) y andalucismos (alcaucil ‘alcachofa’, cigarrón ‘saltamontes’). El estudio concluye con la descripción de las modalidades más claramente diferenciadas respecto del castellano: las hablas arcaizantes - por una parte, el chinato, es decir, el habla de Malpartida de Plasencia, y, por otra, la de Serradilla, aún hoy viva: su principal interés consiste en la conservación de un consonantismo muy cercano al de la lengua medieval -, las hablas de la comarca de La Raya - con rasgos fonéticos que recuerdan los del gallego-portugués, como la no diptongación de las vocales abiertas tónicas latinovulgares, el mantenimiento de los diptongos decrecientes, la distinción de sibilantes, pérdida de -ny -lintervocálicas, etc. -, así como, finalmente, el castúo, esto es, el extremeño literario cuya cumbre constituyeron las obras de Gabriel y Galán en Cáceres y de Chamizo en Badajoz. En el segundo capítulo, «Apuntes de geografía lingüística extremeña (datos extraídos del ALPI y otras encuestas)», se analizan los datos (vocalismo, consonantismo, morfología) correspondientes a Extremadura que ofrece el Atlas Lingüístico de la Península Ibérica y se interpretan las áreas lingüísticas más interesantes (las de elementos léxicos como morgaño, aguijón, ferrete o rejón, o de características fonéticas como la realización de la / s/ final de artículo en el sintagma los domingos) principalmente como resultado de los movimientos migratorios en el contexto de la repoblación. A continuación, el autor ofrece los resultados de su análisis de numerosos textos medievales (fueros, ordenanzas y documentos varios). Destaca que ningún texto está redactado en leonés, ni siquiera los que pertenecen a la Extremadura reconquistada desde León (Cáceres, Coria, Usagre, Valencia de Alcántara, Villasbuenas de Gata, etc.), lo cual ha de interpretarse como que «ya en el siglo 378 Besprechungen - Comptes rendus XIII, el castellano era la lengua de prestigio» (40). La realidad lingüística de la Extremadura leonesa se trasluce, no obstante, en forma de numerosos rasgos (en mayor medida léxicos que fonéticos y morfosintácticos) de raigambre inequívocamente occidental. La comparación de textos de diferentes momentos históricos y áreas permite a Ariza comprobar «una progresiva castellanización, al menos en la escritura, que va desechando los viejos dialectalismos, aun cuando . . . muchos de ellos perduren hoy en algunas zonas extremeñas» (46). En el siguiente capítulo, se comenta el texto de un autor local que hace revivir el chinato décadas después de que dejara de hablarse, y se critica una gramática extremeña aparecida en 1995 carente de todo fundamento científico. En «Notas sobre el léxico extremeño» se estudian sesenta extremeñismos léxicos de variada difusión geográfica desde los puntos de vista fonético, semántico, etimológico y dialectal (abadar ‘sosegar, mitigar’; abocedar ‘bostezar’, abriquecer ‘anochecer’, albayada ‘humedad del rocío’, etc.), para clasificarlos finalmente desde la perspectiva de la historia de la lengua como occidentalismos, leonesismos, arcaísmos o meridionalismos. En el capítulo 6, Ariza ofrece un completo inventario de los vocabularios y estudios aparecidos sobre el léxico extremeño y ofrece una acertada valoración crítica de cada obra. Al comentario lingüístico de tres textos se dedica el capítulo siguiente: dos de ellos son literarios (el primero, una poesía de Gabriel y Galán, refleja el habla de la zona limítrofe entre Salamanca y Cáceres; el segundo, obra de Luis Chamizo, reproduce el habla de la zona sur de Extremadura; el tercero pertenece a la colección de textos en chinato transcritos por Diego Catalán en 1954). Estos comentarios concluyen con unas reflexiones sobre el sistema empleado en la representación gráfica de los fenómenos fonéticos dialectales y sobre los principales rasgos fonéticos y fonológicos reflejados en los textos. De forma monográfica se estudian los rasgos lingüísticos dialectales patentes en la obra de Luis Chamizo, representante pacense de la corriente literaria dialectal surgida en diversas regiones españolas a finales del siglo XIX e iniciada en Extremadura por Gabriel y Galán. Los tres trabajos restantes versan sobre temas de onomástica. El recogido como capítulo 8 ofrece un panorama de los estudios sobre toponimia extremeña con amplia bibliografía, mientras que en los capítulos 9 y 10 se exponen los resultados del estudio antroponímico de numerosos documentos de los siglos XVI y XVII, principalmente libros de bautizados y de velados conservados en las parroquias de San Mateo y de Santiago de la ciudad de Cáceres. Los centenares de nombres de persona analizados permiten determinar estadísticamente la popularidad de los nombres de pila vivos en la época y reconstruir el sistema de transmisión de los apellidos y sus posibilidades combinatorias, e incluso constatar ciertas evoluciones producidas a lo largo del período estudiado (como, por ejemplo, el auge de la mención documental del apodo en la última etapa). En definitiva, los once estudios incluidos en el libro que presentamos constituyen una brillante y representativa muestra de la labor investigadora llevada a cabo en los últimos treinta años por Manuel Ariza. El hecho de haberse reunido ahora en una monografía estos trabajos que antes se hallaban dispersos en las más diversas publicaciones nos facilita una visión global de la obra de este lingüista referente a dos de las líneas de investigación en las que más ha destacado, la dialectología y la onomástica, a la par que permite apreciar el notable progreso que ha experimentado, en gran medida precisamente gracias a las aportaciones científicas de Manuel Ariza, nuestro conocimiento sobre la realidad lingüística de Extremadura. Stefan Ruhstaller ★ 379 Besprechungen - Comptes rendus